En cuanto a la depilación, comprender el ciclo de crecimiento del vello es crucial. Muchos factores influyen en el crecimiento del vello, y una de las maneras más efectivas de eliminar el vello no deseado es mediante la depilación láser.
Entendiendo el ciclo de crecimiento del cabello
El ciclo de crecimiento del cabello consta de tres fases principales: la fase anágena (fase de crecimiento), la fase catágena (fase de transición) y la fase telógena (fase de reposo).
1. Fase anágena:
Durante esta fase de crecimiento, el vello crece activamente. Su duración varía según la zona del cuerpo, el sexo y la genética de cada persona. El vello en fase anágena se trata durante el proceso de depilación láser.
2. Fase catágena:
Esta fase de transición es relativamente corta y el folículo piloso se encoge. Se desprende del riego sanguíneo, pero permanece anclado al cuero cabelludo.
3. Fase telógena:
En esta fase de reposo, el cabello desprendido permanece en el folículo hasta que es expulsado por el crecimiento de cabello nuevo durante la siguiente fase anágena.
¿Por qué el invierno es ideal para la depilación?
Durante el invierno, las personas tienden a pasar menos tiempo al sol, lo que resulta en tonos de piel más claros. Esto permite que el láser apunte eficazmente al vello, lo que resulta en tratamientos más eficientes y seguros.
Exponer la zona tratada al sol después del tratamiento puede provocar efectos secundarios indeseables, como hiperpigmentación y ampollas. La menor exposición solar en invierno disminuye el riesgo de estas complicaciones, lo que lo convierte en la época ideal para la depilación láser.
Someterse a la depilación láser durante el invierno permite tiempo suficiente para varias sesiones. Dado que el crecimiento del vello se reduce en esta estación, es más fácil lograr resultados duraderos.
Hora de publicación: 28 de noviembre de 2023